DESDE EL OTRO LADO

Un día más tus mirada ausente me da la bienvenida. Solo tu sonrisa congelada consigue hacerme sonreir.
Solo conozco el rostro de una fotografía que me espera. Ella me dijo como eres, del resto se encarga mi mente y mi corazón.

No sé a qué altura quedan tus ojos frente a los míos, no
podría reconocerte entre ciento de olores, mis manos no conocen el tacto de tu piel.

Tu voz me llega filtrada por la distancia, aunque cada letra que resucita mi pantalla blanca tiene un sonido, una tonalidad.
Te busco entre las notas de cada canción, te reconstruyo a partir de imagenes, de fotogramas que cobran movimiento como si de una película muda se tratase.
Cada mañana me visto y peino para conocerte, cada noche me desnudo pensando que el siguiente día será el día esperado.
Llevo tiempo esperando que salgas de esa foto, acaricies mis mejillas y me beses.
No me canso de imaginar contigo miles de viajes que nunca haremos, miles de fotos en las que nunca saldremos abrazados.
Ya no se si existes o si mi mente desesperada te inventó. No recuerdo como me llegaste a mi vida pero tampoco recuerdo un solo día en el que no estuvieses tú.

Ansioso espero el momento en el que apareces en forma de letras desde el otro lado.
No me importa que el tiempo pase rápido o despacio, solo sé que cierro los ojos, te siento junto a mi y se para el tiempo.
No eres más que pedacitos de tu vida, no eres más que mi vida entera.
Y aunque nunca llegues a saber todo lo que aquí te digo, te seguiré esperando en cada esquina de mis sueños, ese lugar único donde puedo notar el latido de tu corazón, el olor de tu cuello, el sabor de tus besos...