LAS DOS ISLAS

No hace mucho tiempo existía una isla que albergaba el bien más preciado para la humanidad.
Un buen día, un grupo de desconocidos deseó tanto llegar a la isla que por arte de magia aparecieron en un precioso claro rodeado por playas paradisiacas llenas de todo tipo de lujos y caprichos.
Los jóvenes quedaron asombrados ante semejante lugar,se miraron y comprobaron que ninguno se conocía.
Tras horas de charlas y anécdotas,descubrieron que lo único que tenían en común era el deseo llegar a la isla.
En un principio pensaron que estaban en ella,pero el tiempo pasaba y por más que buscaban no encontraban lo que tanto anhelaban.
Tras horas de rutas por montañas y senderos uno de ellos divisó a lo lejos una gran isla,mucho más asombrante que la que pisaban.

Quizás lo que buscaban estaba allí, por lo que decidieron construir un gran barco capaz de transportarlos a todos a la otra isla.
Decidieron trabajar en equipo y repartirse las tareas.
Los días pasaban como horas y la embarcación no avanzaba a la velocidad prevista.
Poco a poco las fuerzas iban menguando.Algunos fueron desistiendo en sus tareas,otros empezaron a añorar sus vidas anteriores.
Empezaron a surgir redencillas entre el grupo, y lo que un principio era unión acabó convirtiéndose en un descontrol.
La construcción avanzaba cada vez más lento debido a las disputas e individualidades que acontecían cada día.
Surgieron divisiones de grupo y decidieron seguir la construcción del barco por separado,sin dirigirse la palabra y evitando encontrase unos con otros.
Tras meses de trabajo el barco estaba listo.
Se unieron por fin para ver lo que habian construido,pero el resultado no había sido el esperado.
Aún así empujaron la nave al mar y montaron en ella.
A los pocos minutos el barco empezó a hundirse.
Rápidamente se tiraron al agua y empujaron de nuevo el barco a la playa.
Sólo aguantaría el peso de la mitad de ellos.
Cada uno de ellos alegó sus motivos para ganarse su puesto en el barco.
Unos hablaron de su esfuerzo en la construcción,otros utilizaron su palabrería para engatusar al resto,otros utilizaron las amenazas como argumento,otros querían dejar el destino a manos de la suerte...
Sin llegar a un acuerdo la noche se les vino encima y decidieron posponer el viaje al siguiente día.
La oscuridad fue cómplice de susurros y alianzas.
Unos gritos despertaron el amanecer.
El color rojo teñia la blanca arena de la playa.
Con desconfianza y temor se miraron y comprobaron que aún eran demasiados para montar en el barco.
Un grupo reducido, con antorchas en mano, prendieron fuego a la isla mientras corrían hacia el barco,así evitaban que pudieran alcanzarles a nado y hundieran de nuevo el barco.
Mientras se alejaban observaban mudos como la isla, donde habían vivido tanto tiempo se consumía junto con sus compañeros.
De pronto el cielo se cubrió de oscuridad y una gran tormenta se precipitó sobre ellos.
El barco era débil debido a la falta de unión en su construcción, por ello en pocos segundos la mar enfurecida empezó a engullir la embarcación.
Mientras se hundían, uno de ellos vislumbró en lo alto de una cima en llamas lo que tanto había deseado.
Dos mares saladas se mezclaban mientras lo que tanto anhelaban era pasto del fuego.